Todas llevamos dentro un monstruo. Hay uno en ti, en mí,
les Belles de Nina.
¿Y si lo liberamos?
Hola, ya está, el bonito diablo ha salido de su caja de trucos y está listo para hacer muecas. O poner los ojos como platos con las pupilas en forma de corazón. O esbozar una sonrisa engañosamente voraz – te deseo, te voy a comer. Es la agitación de los demonios, como Nina, como Luna, particulares, únicas, desencadenadas.
A dúo, nunca sin mi BFF, something crazy is coming. Cuidado con estas locuras alegres. Basta con estar dispuesta a seguir los pasos de Nina y de Luna a través del desordenado bosque, entre una marabunta de sus animales-tótem, un búho blanco y un lobo gris repentinamente liberados. Atención, bestiario de adorables criaturas, suaves traviesas, con penacho y pompón de piel. Love at first sight.
Nina Ricci renueva el género con Ana Strumpf y Guto Requena. Los dos artistas brasileños forman un tándem pop, fun e imparable. En el torbellino de un bosque encantado, con serpientes encantadoras, flores, mariposas y setas, revisitan los frascos de Nina y Luna. Les Baisers de Nina Ricci, una colección de barras de labios versionadas en rojo, coral, rosa y fucsia, completan estas ediciones exclusivas. La ilustradora y el arquitecto firman a cuatro manos esta delicada locura.
Para liberar totalmente a nuestros pequeños monstruos, Nina Ricci se da el gusto de revisitar sus míticas fragancias. Nina se metamorfosea en una pera chispeante envuelta en algodón de azúcar, Luna en una jugosa piña infiltrada de limón y Luna Blossom en un travieso mochi con flor de azahar.
Y para San Valentín, Nina Ricci abre las puertas al encantamiento. Un entresijo de flores, serpientes y estrellas adorna una cenefa de Les Baisers de Nina Ricci.
Kiss me tender, little Monster.
#freethemonster
